Las TICs en la salud.

¿Somos víctimas de las redes sociales o es una servidumbre voluntaria?

Las redes sociales nos han facilitado el acceso a la información, pues pasaron de ser un simple medio de interacción social, utilizado únicamente para entablar conversaciones o interactuar con distintas personas, a ser una de las principales fuentes de información. Indispensables, no sólo para las personas comunes, sino para empresas, personas públicas y hasta para los propios medios de comunicación como periódicos, revistas, televisoras, etc.

Para cada una de las entidades que deseen transmitir información, tener una cuenta en una red social es vital. Hoy en día, los usuarios suelen consultar primero en internet, pues pasan más del 60% de su día Online y su principal fuente de consulta son las RRSS, en ellas se enteran las noticias más actuales a nivel mundial de manera casi inmediata, de este modo la información bien dirigida se convierte en contenido viral.

Las redes sociales transmiten información, sin embargo,  no la regulan en su totalidad, es decir, que es probable que nos encontremos con contenido de calidad, noticias que nos hablen de los cambios que surgen en la economía, la transformación de leyes en nuestro país, algún acontecimiento de la naturaleza próximo a ocurrir, etc., pero también es común que seamos victimas de mala información. No toda la información compartida a través de este medio es fiable o verdadera, existen muchas notas denominadas como amarillistas que en ocasiones son meramente ficticias (aunque no son presentadas así) y notas que deforman los acontecimientos o manipulan la información beneficiando a quién desea distribuirla.

Los medios de comunicación digitales, en especial las redes sociales, llegaron para ser parte de nuestra vida y lejos de pensar en desaparecer, buscan evolucionar. Por ello, es necesario crear un criterio que nos ayude a filtrar la información que encontramos en internet, así como, tener un criterio propio que fomente el cuestionamiento y la crítica constructiva, pues el cuarto poder llegó para quedarse ya que es capaz de manipular masas, persuadir ideologías y crear nuevos seguidores.